En el equipo de Tourbly, muchos de nosotros somos amantes de los viajes, y naturalmente, siempre estamos en la búsqueda de los lugares más populares cada vez que visitamos un destino nuevo. Con favoritos como Termales Guasca, Truchas El Abuelo y Capillas de Siecha entre otros, prepárate para experimentar los mejores cosas qué hacer y qué ver en Guasca.
5 mejores cosas qué hacer y qué ver en Guasca
1
Termales Guasca
★★☆☆☆
2.5
(88)
2.5 de 5 estrellas
Spas termales
Termales Guasca, ubicado en el tranquilo pueblo de Guasca, es un lugar ideal para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Sus piscinas se adaptan a todos los gustos y temperaturas, ofreciendo desde aguas calientes hasta más frescas. El lugar destaca por su buena relación costo-beneficio, ofreciendo desayuno y almuerzo a precios apropiados. Además, el personal es amable y atento. Si estás buscando escapar del ajetreo diario y descansar en un entorno natural, Termales Guasca es el lugar perfecto para sumergirte en un oasis de relajación.
Buena relación costo beneficio. Desayuno y almuerzo a precios apropiados. La temperatura del agua buena y el servicio en general permite una buena experiencia
Fuimos con mi familia, fue una linda experiencia, las piscinas son para todos los gustos y temperaturas, es muy importante conocer los horarios y tiempos disponibles para aprovechar el tiempo al máximo.El personal muy amable, felicitaciones
Km 3 vereda pastor ospina Buena vía fácil de llegar
Truchas El Abuelo es un destino turístico en Guasca, Colombia, ideal para los amantes de la pesca. Su hermoso paisaje y personal amable hacen que sea perfecto para pasar un día en familia. Además de la pesca, ofrecen un delicioso restaurante donde podrás probar platos de alta calidad. Alquilan equipos de pesca y venden carnadas, por lo que no es necesario llevar tu propio equipo. Aunque algunos han mencionado que el servicio puede ser lento, la mayoría destaca la calidad de la pesca y la atención recibida. No te pierdas la oportunidad de disfrutar de este paraíso natural.
La actividad de pesca es muy recomendada, fuimos temprano, a eso de las 10 a.m. Fueron muy amables en la atención tanto en la recepción como en la asistencia para pescar. No comimos en el sitio, pero sí pagamos lo que pescamos, y no hubo inconveniente (arreglaron el pescado que sacamos).Requiere paciencia para poder agarrar algo, así que si no tiene paciencia, mejor piense solo en ir a comer.Para la fecha (junio 2023) el valor de entrada fue de $5.000, el alquiler de caña de $13.000 y la carnada $6.000Nos gustó el plan, más bien calmado y chévere para conectar con la naturaleza del lugar.
Exelente lugar.un paisaje hermoso para compartir en familia.Y buena peca, rica la comida y exelente servicio..
Es un buen plan, lindo paisaje, fácil la pesca y un buen restaurante! Existen diferentes alternativas y en caso de no querer consumir en el restaurante, el plan de pescar es un buen plan!
Puedes pescar tu propia trucha y pedir que te la preparen o llevarla. En el lugar alquilan las cañas y venden las carnadas. El lago es grande y muy agradable. Tienen que mejorar las instalaciones, el servicio es muy lento. No tenían postres aunque se ofrecían en la carta.
El restaurante está descuido, la pesca es muy buena y saben enseñar con buenas cañas , hay suficientes peces y de buen tamaño.
Lindo lugar, comida muy rica, karaoke, pesca y tejo recomendadisimo para pasar un día divertido con familia y amigos
Las Capillas de Siecha en Guasca son un fascinante tesoro histórico, aunque se encuentran en mal estado. Estas capillas del siglo XVII, declaradas monumento nacional, ofrecen una ventana al pasado y están ubicadas en un impresionante entorno campestre cerca del pueblo y de las lagunas de Siecha. Aunque solo se pueden admirar desde fuera, su belleza y encanto histórico hacen que valga la pena visitarlas. A pesar de su abandono, el lugar ofrece un ambiente tranquilo y apacible, ideal para tomar fotos y sumergirse en su encanto único. Una opción interesante para amantes de la historia y la arquitectura.
Esto es una propiedad abandonada, casi destruida, no se porque cobran la entrada si no hay nada!! La zona es linda porque es puro campo pero no tiene mayor atractivo
Vale $2.000 la entrada, la vende un campesino al frente, es una capilla sin nada por dentro, esta muy abandonada. Que pesar debería estar en mejor estado.
Entrada a $2000, cuidado por gente de la vereda, está poco alterado, muy cerca del pueblo, interesante conocer la historia de las capillas. Queda en la misma ruta hacia las lagunas de Siecha.
Desafortunadamente a pesar de los siglos que tiene la capilla y su importancia, esta en malas condiciones, la belleza de la construccion queda empañada por la falta de interes en conservarla, se pagan $2.000 pesos por entrar al predio donde se encuentra, se ingresa por la misma ruta que conduce a la laguna de Siecha.
Sorpresa del camino muy Linda, se pueden tomar buenas fotos, lo único es que hay que pagar para entrar
Una capilla del siglo XVII en un entorno muy bonito. Se puede disfrutar las vistas desde fuera y entrar en la capilla.
La capilla de doecha es una hermosa construccion de mas de 400 años.Fué declarada monumento nacional en los años 1800.Sin embargo es triste ver el total abandono en que se encuentra.El lugar es hermoso ,apacible y fácil acceso.Cuesta 2000 pesos el ingreso.Pero la capulla en si está en mal estado y el lugar un poco abandonado.Es agradable visitarla pero se queda con el sin sabor que a nadie le interesa cuidar nuestro patrimonio cultural.
La Reserva Natural El Chochal de Siecha, cerca de Bogotá, es un refugio tranquilo y natural. Los anfitriones te hacen sentir bienvenido y comparten su amor por la tierra. Hay una vida silvestre diversa y hermosos paisajes para explorar. Además, se pueden alimentar animales, relajarse junto a un lago y explorar quebradas. Puedes pasar el día o quedarte en la cabaña de piedra. También ofrecen almuerzos colombianos tradicionales. Es el lugar perfecto para desconectar de la ciudad y disfrutar de la magia de la naturaleza.
Celebración del día de la madre con la madre tierra. Una muy linda experiencia de principio y fin. El cuidado de la vida y su diversidad en cada rincón. Luis , Maritza, Sergio, Jesús y fu familia son maravillosos anfitriones y cuidadores.Dan ganas de no salir y de volver.Paciencia y fuerza con la carretera, pero vale la pena¡¡¡
Un lugar ideal para estar en contacto con naturaleza. Visitamos la reserva en familia y con nuestras niñas pequeñas que disfrutaron cada espacio, la caminata, darle comida a los animales, ver la quebrada. Los anfitriones (Luis Bernardo, Maritza y Gustavo) son amables y comparten esa pasión por el sitio que transmiten a los visitantes.También ofrecen planes que incluyen almuerzo y hospedaje.
Un lugar muy lindo y especial. La magia de la naturaleza y la interacción con ella es inigualable. Sus hosts son super amables y lo llevan a uno a vivir una gran experiencia.
Ha sido una de las mejores experiencias que hemos tenido mi pareja y yo, las atenciones de Gustavo y Luis son lo mejor, se siente uno en familia, la reserva está muy bien cuidada y sobre todo, el amor, la pasión y la entrega a este pedazo de tierra de esta gente te hace creer que todavía hay salvación para este planeta.
Excelente sitio para respirar aire puro, conexión total con la naturaleza. una vista espectacular. paisajes alucinantes.
Es un tesoro escondido muy cerca de Bogotá. Luis y Maritza son unos anfitriones excelentes (dueños) y Gustavo (el administrador) es una persona maravillosa que se preocupó todo el tiempo por hacer de nuestra estadía una gran experiencia. Casa de piedra(uno de los hospedajes) es un rincón acogedor que a través de su decoración nos transporta a regiones típicas de Colombia y del mundo. Es un entorno maravilloso donde la naturaleza ofrece un espacio para el descanso, la contemplación y la reflexión. Ofrecen platos típicos Colombianos de muy buena Calidad. Recomendado para planes de pareja o familiares, no se arrepentirán.
Excelente experiencia para alejarse del estrés de Bogotá. Con mi novia quisimos celebrar su cumpleaños en un sitio distinto, y me encontré con esta reserva por pura casualidad. Gustavo (el guía) fue muy atento y nos recibió con una sonrisa. La caminata no es tan larga: con fotos y todo se van como 3 horas. Hay varios animales de finca que se pueden alimentar. También hay un pequeño lago donde hay patos.Se respira un aire de tranquilidad en la reserva. También se pueden organizar almuerzos y quedadas a dormir en la cabaña, si se desea.
Un poco difícil la llegada, se requiere un poco más de señalización. Cuando se llega a la reserva es un espectáculo, Gustavo (guía) es muy atento, muy amplio en sus explicaciones y su pasión hace que la experiencia sea única. Los puntos de descanso atendidos por los dueños de la reserva y su papá son también un momento muy agradable de la experiencia. Me encanto la visita, paisajes hermosos y diferentes y con gusto la volvería a repetir y la recomiendo a todos los amantes de la naturaleza ❤️
Si quieres alejarse de la ciudad y pasar un día tranquilo en un lugar espectacular este es el sitio... Sin internet alejado del ruido.. increible
La Reserva Biológica Encenillos, ubicada en Guasca, es una joya natural cerca de Bogotá. Con senderos bien cuidados, podrás disfrutar de una caminata rodeado de naturaleza exuberante y apreciar paisajes hermosos. Su mirador en el punto más alto ofrece una vista panorámica de 360 grados de la región. También ofrece opciones de camping para los amantes de la naturaleza. El clima puede ser frío, así que lleva ropa abrigada. No te arrepentirás de explorar esta reserva y conectar con la naturaleza en su máximo esplendor.
Fuí con bastantes expectativas. Para ser una iniciativa privada falta muchísimo en infraestructura básica. El mapa de la reserva está tan viejo que no se ven los senderos. No te dan siquiera un mapa impreso para la caminata. Hay sectores muy complicados y resbalosos. A los que han ido a US o Canadá saben que los senderos son muy bien hechos con madera para apoyar pies y brazos. La reserva es muy linda pero le hace falta mucha infraestructura básica. Ojalá inviertan en esto y pueda llegar a ser un atractivo turístico importante. Tampoco vimos orquídeas que es supuestamente uno de los atractivos.
Área con interesantes procesos de restauración ecológica y ecoturismo. Tienen un pequeño semillero donde están propagando orquídeas nativas. Están haciendo una restauración gradual de áreas nativas degradadas, con material vegetal nativo, tienen sendero ecológico con guías de la propia región. Almuerzo delicioso, acogedor. Están desarrollando proyectos de investigación como el control de rétamo espinoso con doseles arbóreos.
Fui con mi esposa y mis hijos y disfrutamos por los senderos señalizados y muy bien mantenidos, Naturaleza al máximo.
Un absoluto escape del contaminado Bogotá y muy cerca. Paisajes muy bonitos y opciones de caminos para disfrutar dependiendo del tiempo y condición física. Atención amable. Fácil de llegar
Un lugar para disfrutar! Tiene varias rutas para llegar al mirador, el recorrido subiendo puede tomar entre una hora y media y dos horas. Tiene buena señalización y es de un adecuado transito. Llegar al mirador requiere un esfuerzo físico medio, y es bueno llevar hidratación suficiente y un impermeable por si llueve. La vista desde el mirador es la recompensa por el esfuerzo, muy bonita panorámica de la zona.
Pagas 18000 por adulto y 16000 por niño. Estuvimos solos, nos dijeron que si queríamos guia se debía avisar con tiempo. No esta muy bien señalizado pero el sendero lo lleva a uno. Lindo paisaje.
lindas caminatas por paisajes típicos de los bosques de niebla y el subparamo de la región andina vecina al parque nacional chingaza se asciende por cualquiera de los 4 senderos al mirador punto mas alto del la reserva que esta a 3250 metros de altura desde donde se tiene una vista espectacular de 360 grados de la región , los caminos son de dificultad moderada , bien mantenidos y brindan la oportunidad de interactuar con muchas especies de la flora y fauna que habitan en este ecosistema-en las dos oportunidades que he visitado, la temperatura en promedio ha sido de 10 grados, la neblina , la llovizna y el sol se alternan ,,,,,,,,,,,,,es recomendable llevar zapatos cómodos e impermeables, un buen impermeable y una muda para cambio , no es necesario contratar a un guía son senderos bien señalizados cortos de dos horas en promedio. el valor de entrada al parque es de $18000 mil pesos persona. un lugar para regresar y regresar y para las personas interesadas en el birding hay opciones de entrar o permanecer en la reserva a horas apropiadas para esta actividad,
Un lugar para conectarse con la naturaleza, muy cerca de Bogotá, un paisaje majestuoso. Super recomendado
Está bien para caminar, respirar aire puro y ver una buena vista. Hay un lotecito para camping pequeño pero sin servicios adicionales aparte de una enramada con una mesa y una teja. Totalmente natural.
A una hora de Bogotá hay un lugar que hace 20 años era una mina de caliza y hoy gracias al trabajo de la Fundación Natura, la comunidad y la donación de los predios crece y se reforesta parte del bosque alto andino propio de la región, la naturaleza tiene memoria y es maravilloso ver la cantidad de flora y fauna que albergan las mas de 200 hectáreas del lugar, hay diferentes tipos de senderos para todos los gustos y con niveles de dificultad variables, hay que llegar temprano para dejarse cautivar por las aves que se pueden ver y oír, y caminar y sentir la naturaleza, hace frió (6°C-12°C) y se debe ir abrigado y preparado para lluvia, la vista desde el mirador en un día despejado es increíble. Es un destino perfecto para una aventura cerca de la ciudad.
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